Wednesday, February 4, 2009

::: resbaló, cayó y se golpeó :::

Antes o después tenía que pasar. A los 7 meses no se gatea, verdad?. Sin perder la sonrisa, mi pequeña N de Nikita, ayer gateando se resbaló, cayó y se dió con el suelo en la naríz. Fueron solo unos minutos, pero el camino de la oficina a casa en carro oficial, cruzando las mil rotondas de la ciudad, se me hizo eterno. Una vez tuve a Nikita en brazos se me cortó la respiración, al verla con tremenda sonrisa y ese moradito en lo alto de su tabique nasal. Llamé a la pediatra y me recetó gotas anti-inflamatorias. Cuando recuperé la cordura (y la respiración) pude entender que a partir de ahora, a chicho-terremoto-N-de-Nikita le sucederán mil y un percances, su inquietud por descubrir y no permanecer en el mismo lugar más de un ratito apunta a que los chichones serán parte de su vida, igual que fueron, sin duda alguna, parte de la mía... y vaya sorpresa, siguen siéndolo con 32 años!!!

2 comments:

Anonymous said...

Es lo que tiene ser una aventurera, que se corren esos riesgos, y sino que se lo digan a Indiana Jones cómo está de golpes.
Pobrecita, su primer chichón... pronto empieza!!!

cricri said...

Pues sí, Nikita es muy precoz para todo...el primer chichón de Óli llegó con 11 meses cuando intentaba andar agarrado a lo que sea...paciencia guapa!!